¡El verano ya está aquí! Aquí tienes consejos para divertirte con los más pequeños:

Por Hilary Stempel, MD, MPH

Con el cambio de estación y los niños trabajando para alcanzar nuevos objetivos, siempre me emociona ver qué nuevas actividades podemos añadir a nuestra lista de diversión familiar. El verano me recuerda a pasar tiempo al aire libre, plantar en nuestro pequeño jardín y conocer a todos los niños del vecindario.

 

Para los bebés y los niños pequeños, hacer un poco de preparación puede hacer que el calor y los largos días de verano sean de lo más agradable.

 

Sol de verano

• Ten en cuenta el tiempo. Si vives en una zona de clima cálido, intenta salir a primera hora de la mañana y a última de la tarde para aprovechar el tiempo más fresco.
• Saca el protector solar. A partir de los 6 meses, los niños deben usar siempre protección solar para evitar quemaduras. Los sticks de protección solar pueden ser útiles para aplicar la crema en la cara de los niños más asustadizos. Los sprays de protección solar son útiles para los niños mayores, pero hay que evitar aplicarlos en la cara. Mantenga a los más pequeños en la sombra y utilice protección solar con moderación. 
• Busca lugares de juego con sombra. Esto les ayudará a mantenerse frescos mientras exploran. Escarbar en la tierra, hacer burbujas o jugar con tiza en la acera son actividades que siempre les gustan a los niños. 
• Vista a los niños con ropa de colores claros. Si es posible, ponles manga larga para protegerles del sol. Las lycras de manga larga son ideales para jugar en el agua.
• Mantente hidratado. Ten siempre agua a mano. Enséñale a los niños pequeños a beber agua en vasos con pajita o en vasos abiertos. Estar al aire libre es un buen momento para practicar cómo beber agua de un vaso abierto, ¡así no tendrás que preocuparte de limpiar todos los derrames! 
• Bloquea el sol a la hora de la siesta. Si la hora de la siesta parece más corta y la habitación de tu bebé o niño pequeño es luminosa, invierte en unas cortinas opacas temporales para oscurecer su entorno de sueño. O utiliza cinta de pintor para colocar bolsas de basura negras en las ventanas y oscurecer la habitación.

 

Actividades de verano

• Picnic en el parque. Los parques y zonas de juego cercanas son siempre un lugar maravilloso para conocer nuevos amigos. Hacer una comida campestre puede ser una divertida aventura con un bebé o un niño pequeño.
• Explora los espacios interiores. Busca lugares con aire acondicionado cerca de donde vives. Puede ser un buen momento para visitar la biblioteca o los museos locales. Puede que a tus hijos les fascine hacer recados contigo. Una excursión al supermercado puede ser el momento perfecto para hablar de colores y elegir una fruta o verdura nueva para probar en casa. 
• A la mayoría de los niños les encanta chapotear en el agua. Con tupperware de plástico puedes crear mini zonas de chapoteo, hacer que los niños laven sus juguetes de plástico, jugar con espuma de jabón o experimentar con colorantes alimentarios. Teñir y congelar cubitos de hielo con colorante alimentario que no manche puede ser un divertido experimento para jugar.

Recuerda: ¡el aburrimiento no es tu enemigo! Cuando los niños se aburren, es cuando su imaginación se pone en marcha. Aunque parezca que hace demasiado calor para salir a la calle, evita la tentación de tener a tu hijo mirando una pantalla todo el día. Aunque algunos programas puedan parecer educativos, tú siempre serás el mejor profesor de tu hijo. Mientras te preparas para el verano, recuerda: nunca dejes a un niño en un coche estacionado, ponte siempre protección solar, mantente a una distancia adecuada cuando tus hijos estén cerca del agua, ¡y no olvides divertirte!